Tratamiento sistémico no biológico. Metotrexato.

Inyectable, para administración subcutánea.

¿Cuándo se utiliza?

Es muy eficaz para el control de la psoriasis, la artritis psoriásica y otras enfermedades inflamatorias, y se usa cuando no hay mejora con otros tratamientos.

¿Cómo se administra?

Solo o asociado a otros fármacos, incluidos los antiinflamatorios y los medicamentos biológicos.
La forma farmacéutica para administrar el metotrexato por vía oral son los comprimidos, para la administración subcutánea son las jeringas precargadas y las plumas precargadas, y para la administración intramuscular e intravenosa se hace en forma de viales o jeringas precargadas.
Tanto en la psoriasis como en la artritis psoriásica se administra habitualmente por vía oral, aunque en ocasiones, por molestias digestivas y para mejorar su eficacia, puede administrarse por vía subcutánea. La dosis que se utiliza varía entre 7,5 mg y 25 mg a la semana. Generalmente, las dosis necesarias para controlar la psoriasis cutáneas son menores que para controlar la artritis psoriásica.
Vía subcutánea: la dosis semanal recetada se administra en una sola inyección semanal.
Vía oral: se aconseja tomar todas las pastillas repartidas en dos tomas un solo día a la semana. Es decir, toda la medicación se toma un día a la semana y siempre que sea posible el mismo. Si se olvida una toma, se debe continuar con la siguiente a la hora que toque y a la dosis que toque. No se ha de tomar el doble para compensar la que se ha olvidado.

¿Cuál es su eficacia?

El metotrexato es muy eficaz para la psoriasis cutánea y consigue un buen control de la enfermedad en la mayoría de pacientes. La limitación de su uso son los posibles efectos secundarios a corto y a largo plazo. En la artritis psoriásica, al igual que el resto de medicamentos modificadores de la enfermedad (FAME), se ha mostrado solo eficaz en la artritis que afecta a las articulaciones de las extremidades (periférica). Este medicamento no permite tratar las manifestaciones que afectan a la columna vertebral (axiales), la entesitis (inflamación de la zona de inserción en el hueso de un músculo, un tendón o un ligamento), ni la dactilitis (artritis que afecta directamente a los dedos de las manos o de los pies).

Efectos secundarios

El metotrexato, en general, es bien tolerado, pero algunas personas pueden experimentar:

  • Molestias digestivas: como pesadez de estómago, náuseas, vómitos, pérdida de apetito, diarrea o úlceras de la boca. Si tienes alguno de estos síntomas, consulta con tu médico; muy a menudo pueden corregirse modificando la forma de administración o la dosis.
  • Daño en el hígado: se trata en general de leve aumento de las enzimas hepáticas y es especialmente frecuente y grave en pacientes con obesidad y esteatosis hepática. Si el aumento de enzimas hepáticas se mantiene, debe suspenderse el medicamento para evitar hepatotoxicidades graves con su uso crónico. El médico solicitará análisis periódicos para controlar esta posibilidad. Es muy importante no beber alcohol durante el tratamiento con este medicamento.
  • Toxicidad grave sobre la médula ósea y el pulmón: aunque es muy poco frecuente, si durante el tratamiento presentas fiebre, hematomas, sangrado anormal de cualquier localización, cansancio intenso, tos seca o dificultad para respirar, deja el tratamiento y consulta a tu médico.
  • Para detectar posibles efectos secundarios, hay que realizar un análisis de sangre durante el primer mes tras el inicio del tratamiento y, posteriormente, de forma periódica para controlar el hemograma (glóbulos rojos y blancos) y el funcionamiento del hígado.

Recomendaciones

  • Para evitar algunos de los efectos adversos asociados al tratamiento con metotrexato, se aconseja tomar 1 comprimido a la semana de 5 mg de ácido fólico, el día después de la toma del metotrexato, para mejorar su tolerabilidad.
  • Extremar las medidas de control si se administra este fármaco en personas de edad avanzada o con insuficiencia renal, por incremento de su toxicidad. Está contraindicado en niños, mujeres embarazadas y pacientes con insuficiencia hepática o renal moderada-grave, con úlcera de estómago o con infecciones activas.
  • Tanto hombres como mujeres en edad fértil tienen que tomar medidas anticonceptivas eficaces durante el tratamiento. Se tiene que suspender el medicamento 6 meses antes de intentar concebir un hijo. En los hombres, mientras se toma el fármaco, causa oligoespermia transitoria (concentración disminuida de espermatozoides), con lo que reduce la posibilidad de embarazo. También puede provocar aborto.
  • Durante el tratamiento, no se puede tomar alcohol ni otros medicamentos que puedan interferir con el metotrexato o dañar el hígado.