Tratamiento biológico. Biosimilar de adalimumab.
Los tratamientos biológicos son proteínas similares a las humanas producidas por técnicas de biotecnología. Actúan sobre la inflamación de las articulaciones y de la piel, corrigiendo la respuesta inmunológica acelerada y errónea que se da en la psoriasis y la artritis psoriásica. Su función es la de bloquear la actividad de uno de los agentes clave en el proceso inflamatorio que se produce en ambas enfermedades (las citosinas).
Estos medicamentos son efectivos para controlar la inflamación y el dolor articular, además de prevenir la progresión de la enfermedad y frenar la progresión del daño articular, en el caso de la artritis.
Un biosimilar es un fármaco biológico (fabricado mediante síntesis biológica efectuada mediante cultivos celulares), con un principio activo comparable al medicamento biológico de referencia. Un biosimilar se puede fabricar y comercializar una vez que la patente de la molécula biológica original ha expirado, lo que sucede al cabo de 10 años de su registro. El concepto de medicamento biosimilar es el equivalente al de medicamento genérico, con la diferencia que los primeros son de síntesis biológica y los segundos de síntesis química, por esto se denominan de forma distinta. La estructura molecular, la eficacia y la seguridad de los fármacos biosimilares, como su nombre indica, son similares pero no idénticos al fármaco original, a diferencia de los medicamentos genéricos, que son idénticos al original.
¿Cuándo se utiliza?
Cuando el tratamiento con los medicamentos sistémicos clásicos no hace efecto, con independencia de su gravedad
¿Cómo se administra?
Se administra por vía subcutánea. Se presenta en una pluma que viene con el medicamento precargado y permite su autoadministración con facilidad. El tratamiento suele iniciarse con una dosis de dos inyecciones en la semana 0, una inyección en la semana 1 y, a partir de esta, una inyección cada 2 semanas. Puede utilizarse como tratamiento hasta la remisión de los brotes o como tratamiento de mantenimiento.
¿Cuál es su eficacia?
Su eficacia es similar a los otros anti-TNF. La respuesta clínica se alcanza normalmente dentro de las 12 primeras semanas de tratamiento.
Efectos secundarios.
Los efectos secundarios son similares a los observados con otros medicamentos anti-TNF. Las precauciones que hay que tomar antes de su administración son similares a las de otros biológicos con efecto anti-TNF: evitar el uso en pacientes con enfermedades neurológicas desmielinizantes y realizar quimioprofilaxis previa en caso de infección tuberculosa latente. Existe una amplia experiencia de su uso de forma ininterrumpida durante más de 10 años sin efectos secundarios importantes.