Tratamiento biológico. Secukinumab. Fármaco inhibidor del eje IL-17.

Los tratamientos biológicos son proteínas similares a las humanas producidas por técnicas de biotecnología. Actúan sobre la inflamación de las articulaciones y de la piel, corrigiendo la respuesta inmunológica acelerada y errónea que se da en la psoriasis y la artritis psoriásica. Su función es la de bloquear la actividad de uno de los agentes clave en el proceso inflamatorio que se produce en ambas enfermedades (las citosinas).

Estos medicamentos son efectivos para controlar la inflamación y el dolor articular, además de prevenir la progresión de la enfermedad y frenar la progresión del daño articular, en el caso de la artritis.

Secukinumab es un anticuerpo monoclonal humano IgG1 que inhibe específicamente la IL-17, una sustancia fundamental en el desarrollo de la inflamación de la piel y articulaciones.

¿Cuándo se utiliza?

Está indicado para el tratamiento de la psoriasis en placas de moderada a grave en adultos que sean candidatos a tratamiento sistémico. Tiene indicación también para el tratamiento de la artritis psoriásica moderada y grave.

¿Cómo se administra?

Se comercializa en dos presentaciones, jeringa precargada y pluma precargada de 150 mg, para administrar por vía subcutánea. Para el tratamiento de la psoriasis, se usa a dosis de 300 mg (dos inyecciones el mismo día) en la fase de inducción las semanas 0, 1, 2, 3 y 4, y mensualmente en la fase de mantenimiento. Para la artritis psoriásica en pacientes que no han sido tratados previamente con medicamentos biológicos, la dosis es de 150 mg, y si el paciente ha recibido y no ha mejorado de forma adecuada con el tratamiento biológico anti-TNF?, la dosis recomendada es de 300 mg, con la misma pauta de administración.

¿Cuál es su eficacia?

En los ensayos clínicos, secukinumab demostró unas altas tasas de eficacia con independencia de la edad, el sexo, la raza, el peso corporal y la gravedad de las lesiones. Los resultados de los ensayos clínicos han demostrado rapidez de acción, con efectos apreciables a las dos semanas y altos índices de blanqueamiento completo en el 35 % de los pacientes. En los ensayos clínicos, la eficacia se mantuvo hasta los 3 años de tratamiento.

Efectos secundarios

El perfil de seguridad se considera adecuado, sin indicios de un aumento de cáncer ni de infecciones graves. Al igual que con los otros inhibidores de la IL17, se ha visto que puede aumentar ligeramente la frecuencia (3,5 % de los pacientes) de las infecciones fúngicas leves por Candida albicans durante los primeros meses de tratamiento, y también se recomienda no usarlo en pacientes con enfermedad de Crohn activa.